Jesús, nuestro Señor está con nosotros bajo las apariencias
del vino que no es vino, sino su
sangre, y del pan, que no es pan, sino su carne. "Por eso el que come mi
carne y bebe mi sangre, permanece en mi y yo en el... y no morirá, sino tendrá
VIDA ETERNA, y yo lo resucitaré el último día. Jn 6, 51-56. Paz y Bien. Antonio
Medina, OFS (SFO)